Ir al contenido principal

iniciar la memoria en línea

Tras meses de coquetear con la idea de este Blog y luego de poner mil y un pretextos, al fin he decidido a hacerlo.
Tal parece que las largas esperas en pro de un mejor proyecto, siempre son un preludio al momento catártico en que la forma ya no importa tanto como el hecho de que hay algo que decir; y todo termina apareciendo en una ráfaga no muy cuidada.
Y no es que hoy hayan pasado grandes cosas. Las gripes están ahí, todo el tiempo. Supongo que es algo más sencillo. El simple y llano hecho de querer ya hacer algo en la internet, tras tantos compases de espera en pro de hacer una página chida, de hacer que la Página de la Langosta se vea bien... Tantos intentos que se han quedado en horas muertas y html's e interfases flash engordando (o reduciendo) el disco duro...
Tanto para un arranque clásico... Pero supongo que así es esto.
Y supongo que así tenía que salir.
Hoy la única diferencia es que al fin pude acabar El Palacio de la Luna de Paul Auster. Y digo al fin, porque aunque generalmente devoro los libros de Auster, éste me costó demasiado trabajo por el número de tópicos en los que me identificaba con el personaje. O con las situaciones por las que atravesaba el personaje.
Acabarlo fue una liberación especial. Aunque sé que hay frases que dificilmente se borrarán de mi mente. O de mi forma de actuar.
Desde que empecé a leerlo, hubo una frase que alteró mi manera de relacionarme con los medios. Una en la que el personaje aseguraba que no creía más en los teléfonos. Que para él las relaciones humanas eran frente a frente, o no eran. Extrañamente la frase no está subrayada en mi libro. Sólo, pese a lo que recordaba, hay una frase que subrayé y que creo que es la escencia de esta novela. Y la escencia de por qué me dolía tanto leerla:

Hace dos años, por razones tanto personales como filosóficas, decidí dejar de luchar. No era que quisiera matarme, no debe usted creer eso, sino que pensé que, abandonándome al caos del mundo, quizá el mundo acabaría por revelarme alguna secreta armonía, alguna forma o esquema que me ayudaría a penetrar en mí mismo. La idea era aceptar las cosas tal y como son, dejarse llevar por la corriente del universo. No digo que consiguiera hacerlo muy bien. La verdad es que fracasé miserablemente

Paul Auster
El Palacio de la luna pág 91


Y sí, fracasé. No me resigno a cómo son las cosas en este universo. Ni a dejarme llevar por la corriente.
Y creo que me gusta. Pese a todo, me gusta.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Desarmado

La gripa tiene la maldita manía de robarte las fuerzas. Parte de los ánimos Nada ha sucedido. No fuera de las pantallas. Pero los pixeles plantearon un tema digno de mis delirios. De los delirios de cualquier adolescente calenturiento. Me mostraron otra vez que las ficciones que puedo idear muchas veces son igualadas y superadas por la realidad. TV Española dio la noticia (sería raro que la mostrara Televisa). Y luego hubo un complemento en la red. Hunting For Bambi es el nombre de un nuevo " deporte " para gente que destila billetes y no sabe cómo gastarlos. Deporte cinegético con balas de pintura y mujeres desnudas en lugar de venados, bufalos o cualquier otra pieza de caza mayor. Se realiza en el desierto. Ellos vestidos a la usansa militar, ellas sólo con algo así como tenis para "tratar" de correr mejor. Algunos de los entrevistados por TVE decían que era sexy. Algunas de las cazadas, mostraban los moretones de los balazos y una de ellas hasta mencionó l

Bloguear por bloguear

Hace tiempo que esa manera de escribir aquí, pasó de moda, se extinguió en mi ser, así, como solo desvanecida... Supongo que tiene que ver con mi ansia de completud o profesionalismo o cosa por el estilo... Supongo que cuando inicié la aventura bloguera en los lejanos días de julio de 2003, había muchas otras cosas en el horizonte de eventos. Y muchas cosas menos entre las prestaciones... Es decir, no había manera de subir imágenes al blog (y durante un rato se mantuvo así) y podías soltarte a escribir lo que quisieras...sin planear nada, sin tener que pensar en la imagen que acompañaría el texto... y de esto acabo de darme cuenta. Esta entrada tiene una imagen que no tiene nada que ver con lo que estoy escribiendo... la elegí por ser la última descargada a la lap desde el cel... La elegí porque me di cuenta de estas ganas de escribir en el blog, pero del impedimento que la imagen suponía. Aunque también, la cosa es falsa: es la foto de nuestra cena de Thanksgiving, la primera en toda

La primera calle de la soledad en radio BUAP

  Hoy 29 de septiembre, pasadas las 2 de la tarde, tendremos la presentación en Radio BUAP (96.9 FM) en "De eso se trata" con Ricardo Cartas y Juan Nicolás Becerra de mi primera novela en su tercera edición, a cargo del Planeta, a 26 años de la original edición en FETA.    Los esperamos. No falten.