y en el día a día, en cada paseo por la red a uno se le van acumulando novedades que no son suceptibles de aterrizarse en ficciones, en versiones críticas o en debrayes personalizados como los que ocurren en estas pantallas. eso ya me había quedado claro. con este alejamiento de las costas virtuales y de realidad que supuso lo que ya contaba en el anterior post, algo se agregó.
llegar, reestablecer rutinas. reunirse con Eugenio, con Ana y coincidir en esta perspectiva, sobre todo tras revisar el recuento de visitas en Intersectores, hizo que nos planteáramos transformar ese particular sector en una especie de diario, de periódico reinterpretador desde la óptica langostera. el resultado ya es visitable, consultable en línea. ahora Intersectores es una Gaceta dedicada a lo transvirtual, a todo aquel hecho periodístico cuya materia real resulte escurridiza, ensayada, impostada o francamente virtual.
Eugenio ya tenía una reseña del pasado evento en que estuvimos Zárate, Wolfer y yo. por mi parte, en mis surfeos por la red, una nota había sobresalido. y algo más se presentaba como imperante el día de ayer (hace unas horas) y la Lobita ya había identificado otra cosa insoslayable, por lo tanto, Intersectores se ha nutrido en un día, casi igual que en los meses que lleva de existencia La Langosta. y basta de publicidad, mejor visítenla:
c ya soon, u people behind the screen.
llegar, reestablecer rutinas. reunirse con Eugenio, con Ana y coincidir en esta perspectiva, sobre todo tras revisar el recuento de visitas en Intersectores, hizo que nos planteáramos transformar ese particular sector en una especie de diario, de periódico reinterpretador desde la óptica langostera. el resultado ya es visitable, consultable en línea. ahora Intersectores es una Gaceta dedicada a lo transvirtual, a todo aquel hecho periodístico cuya materia real resulte escurridiza, ensayada, impostada o francamente virtual.
Eugenio ya tenía una reseña del pasado evento en que estuvimos Zárate, Wolfer y yo. por mi parte, en mis surfeos por la red, una nota había sobresalido. y algo más se presentaba como imperante el día de ayer (hace unas horas) y la Lobita ya había identificado otra cosa insoslayable, por lo tanto, Intersectores se ha nutrido en un día, casi igual que en los meses que lleva de existencia La Langosta. y basta de publicidad, mejor visítenla:
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